Hay personas que quieren estar cerca de otras por interés o conveniencia. No buscan necesariamente algo material sino afectivo. Son personas que consumen a otras y luego las descartan. Están cerca de los demás mientras le suministren lo que necesitan para sentirse “bien”. Hay quienes buscan sentirse “necesitados” para creerse importantes, quienes buscan ser admirados para creerse valiosos, quienes esperan que les diviertan para sentirse felices, y quienes anhelan que los demás les solucionen todos los inconvenientes para estar tranquilos. En la fe nos ocurre lo mismo cuando buscamos a Jesús por lo que nos da y no por quién es. La tentación de estar cerca de Jesús por los beneficios que puede darnos es grande, pero debemos tener cuidado de sucumbir a la tendencia de buscarlo por lo que nos puede dar. Un verdadero vínculo con Jesús debe ser gratuito porque lo importante es estar con Él, junto a Él, independientemente de lo que puede darnos.
