«Ningún viento es favorable para quien no sabe dónde va», dijo Séneca.
No es «suerte» lo que necesitas en la vida sino un horizonte claro, una meta clara, un puerto seguro hacia dónde dirigirte. Hay personas que no tienen claro hacia dónde van por eso la vida les resulta demasiado pesada y penosa. Cuando tienes claridad hacia dónde te diriges encuentras las oportunidades para llegar hacia dónde quieres ir. Nadie tiene la culpa de que sigas dando vueltas sobre lo mismo y sin llegar a ningún lado. No responsabilices a otros de las decisiones que tomaste y empieza por aclarar tu mente y tu corazón. ¿Hacia dónde quieres ir? No tienes viento en contra, lo que te falta es claridad en tu destino. Levanta la mirada, respira, conecta con tu interior, y tu corazón te marcará el camino»
